jueves, 18 de octubre de 2012

No estaba acostumbrada a aquello

En ocasiones sentía que el mundo se le venía encima, antes escribía, sentía que las cuatro paredes que conformaban su habitación eran poderosas y podían protegerla. Ahora todo había cambiado. De vez en cuando se sentía en el paraíso, eran los días felices que, aunuqe abundaban, no eran todos otras veces, sin embargo, cuando algo se torcía o un día empezaba nublado sentía que no había lugar en esa casa para ella.

Tenía que aprender a buscar su rincón en aquella ciudad, el problema era que no sabía por donde empezar...